
Te espero cada mañana, cada tarde, cada noche.Y mientras te aguardo, oigo tu voz risueña y profunda, veo tu boca que besa y habla, siento tus caricias que me acompañan, huelo tu aroma que me guardé en el bolssillo derecho, recuerdo tus momentos de goce infinito, sueño el reencuentro de nuestros cuerpos.Concentro mis pensamientos en ver tu cara; expando mi aliento hasta tu espalda; ilusiono mis ganas con tus palabras; anuncio mi ansia sin ocultar nada; guardo mis andanzas de madrugada; plasmo mis deseos de abrazos en la alborada; olvido mis miedos bajo la almohada; te ofrezco a lo lejos mi alma; ...y sólo quiero ser tu hada.Y en el camino me encuentro un poeta, un ángel, un mago y un niño que se dan la mano. De esa manera la espera es para mí, el más dulce de los tormentos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario