domingo, 19 de octubre de 2008


Un sentimiento que desgarra completamente tú corazón.

Un sentimiento de ira brutal en tu interior que esclaviza tú alma.

Y no puedes, no puedes ni respirar, porque ese hielo que ha cubierto tú cuerpo ha roto todos tus sentidos.

Y aún así vas al acecho, vas pendiente de cada lado, de cada esquina y de cada barrera que se te expone delante de tus ojos y entorpece tus pasos hacia adelante.

Te muerdes los puños por no saber que hacer, por no saber siquiera si mirar para arriba o seguir cabizbajo, bajo tu propio escondite que te rodea por completo y ni siquiera tú mismo sientes que puedes salir de ahí solo.

De que sirve dar paso a paso a las señales que te marca el destino.

Si la impotencia interior acribilla todo lo que se marca en todos tus pasos, en todos tus actos, hechos y reacciones.

De que sirve, de que sirve hacer algo si a la vuelta de la esquina nada más girar la mirada te encuentras con un golpe en la cabeza que te deja insconciente ante ti mismo, y ante tú vida.

Es rabia,la rabia que te encarcela en ti .

Es esa rabia que a veces no se puede soportar, y lloras, lloras de rabia, por no saber siquiera que hacer contigo misma.

Es algo que cuesta soportar.

Y todos lo hemos sentido alguna vez.

Hasta yo misma.

1 comentario:

M. dijo...

No sabia que también andabas por aqui :)

Mi lista de blogs